A 12 MESES DE LA FIRMA DE UN NUEVO CCT EN GM- SILAO, 12 LECCIONES PARA EL MOVIMIENTO POR LA LIBERTAD SINDICAL Y LA NEGOCIACIÓN COLECTIVA AUTENTICA EN MÉXICO
Dr. Willebaldo Gómez Zuppa[1]
El 10 de mayo de 2023 se cumplió un año de que el Sindicato Independiente Nacional de Trabajadores y Trabajadoras de la Industria Automotriz (SINTTIA) firmó un nuevo Contrato Colectivo de Trabajo con la empresa General Motors, para el complejo de producción y ensamble instalado en Silao, Guanajuato. Frente a esta fecha nos permitimos lanzar algunas reflexiones que podemos extraer de este proceso.
- La Reforma Laboral 2019 ha permitido que los trabajadores mexicanos cuenten con herramientas para reclamar sus derechos humanos laborales, de igual forma el capítulo laboral del T-MEC abre la posibilidad a que los derechos laborales tengan una participación en los acuerdos comerciales y de inversión que se dan en una economía mundializada.
- Cualquier cambio institucional en materia laboral es insuficiente si no existe una organización auténtica de las y los trabajadores, así como una actitud decidida para transformar sus condiciones de trabajo.
- El corporativismo sindical corrupto, antidemocrático y autoritario encarnado en las organizaciones adheridas al Congreso del Trabajo (CTM, CROC, CROM, etc.) no representan ninguna opción para el bienestar de los trabajadores y sus familias en el entorno productivo y económico actual.
- Con una organización decidida de los trabajadores, se puede derrotar al charrismo sindical, y desmontar lo que por décadas instauró como un sistema de corrupción y complicidad entre cúpulas sindicales, empresas e instituciones laborales.
- Las organizaciones sindicales deben combatir la cultura laboral de corrupción y oportunismo que se situó como la forma común de realizar las cosas, sobre todo en la ideología de aquellos trabajadores que asocian sindicalismo con corrupción y una vía para enriquecerse. Cuidar las nuevas organizaciones laborales es tarea primordial, no basta con sobrevivir sino también evitar que se perviertan, por lo que la transparencia, información y organización se vuelven fundamentales.
- El charrismo sindical, así como el marco institucional antidemocrático y autoritario, están muy lejos de ser sepultados, pero las experiencias de trabajadores que han logrado derrotarlo abren una nueva perspectiva para minimizarlo y desaparecerlo. La construcción de un nuevo escenario sindical y laboral en México reclama la participación de todas las organizaciones sindicales democráticas, independientes y con carácter de clase, así como la vinculación de la sociedad civil y las organizaciones de activistas en favor de la libertad sindical.
- Las nuevas alternativas sindicales, deben evitar el sectarismo y atomización típico de los últimos 50 años y deben agruparse en organizaciones regionales y sectoriales que reclamen pisos mínimos de condiciones laborales y que vigilen el respeto a los derechos laborales en todo el país.
- La solidaridad internacional de los trabajadores debe encontrar cauces efectivos más allá de las denuncias, ya que vivimos en una economía y sociedad mundializada en donde el respeto de los derechos humanos laborales tiene que ser vigilado a lo largo de toda la cadena de valor de los productos y servicios que son comercializados en todo el mundo.
- La libertad sindical, negociación colectiva y derecho a huelga son derechos indivisibles que tienen los trabajadores y que México ha refrendado frente a la OIT, por lo cual se debe evitar que los efectos del nuevo marco institucional conduzcan a un escenario en el que estos derechos sean minimizados (que se pierdan los niveles de sindicalización, que se exhorte a no hacer huelgas, que se hagan contrataciones individuales).
- Una negociación colectiva auténtica requiere de un conocimiento pleno de las situaciones económicas, políticas y sectoriales para que los trabajadores puedan intervenir mejor y reclamar justamente los frutos de su trabajo. Es por lo que se requiere la participación y acompañamiento de los especialistas para contar con información oportuna y completa para negociar frente a los representantes del capital.
- La representatividad es un arma fundamental para encarar las negociaciones colectivas, ya que el SINTTIA ganó la titularidad de la representación con un 76% en febrero de 2022 y validó su CCT a finales de mayo de ese año con un 84% de los más de 6,300 trabajadores, mostrando amplio respaldo a la organización laboral frente al corporativo.
- La negociación colectiva que realizó el SINTTIA en 2022 para firmar un nuevo CCT, así como en marzo de 2023, dan cuenta de las posibilidades y limitantes que tiene una organización sindical auténtica, ya que se logró incrementar en un 25.5% el CCT con respecto al anterior, sin embargo, aún queda un largo trayecto para alcanzar los estándares mínimos establecidos el Tratado México – Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
De esta manera podemos ver que, aunque celebramos el primer aniversario del CCT firmado por una representación obrera, no se puede cantar victoria ante los desafíos constantes y riesgos latentes de un sistema antiguo y podrido desde la raíz. Hemos avanzado, pero el camino es largo.
[1] Académico de la FE – UNAM y miembro del equipo de investigación del Centro de Investigación Laboral y Asesoría Sindical (CILAS)