BIELA. Boletín Informativo, Estadístico y Laboral Automotriz #4

Presentamos el número 4 del Boletín de Información Estadística y Laboral Automotriz (BIELA) correspondiente al mes de junio de 2025, que analiza la información más relevante de los cinco primeros meses del año. Se han cumplido dos meses desde el 2 de abril, cuando se impusieron aranceles, generando incertidumbre sobre la dinámica productiva y comercial del mundo.  

En este periodo, la economía mexicana ha navegado por aguas turbulentas, mostrando un desempeño desigual que combina ligeros avances con preocupantes retrocesos en sectores clave. Aunque se evitó una recesión técnica en el arranque del año, el panorama general dista de ser alentador: el crecimiento es débil, la creación de empleo se estanca, y los factores de riesgo —tanto internos como externos— siguen en aumento. El leve crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) del 0.9% en el primer trimestre de 2025, disipo la especulación sobre una recesión, sin embargo, este avance estuvo sostenido principalmente por el buen comportamiento del sector primario, mientras que las actividades secundarias (industria) y terciarias (comercio y servicios) presentaron contracciones leves, lo que refleja una recuperación incompleta y frágil. Uno de los focos rojos lo presenta la pérdida neta de empleos formales. La variación anual del empleo registrado en el IMSS fue de apenas 0.1%, lo que sugiere una desaceleración en la generación de empleo. Este fenómeno deja entrever una mayor incertidumbre entre las empresas para contratar, en un entorno económico que no ofrece garantías.

A esto se suma un clima de incertidumbre que golpea a la inversión productiva. La amenaza de aranceles en Estados Unidos —particularmente en sectores como el automotriz, las autopartes, computadoras, productos electrónicos, acero y aluminio— genera inquietud entre los inversionistas. El escenario político en EE.UU. con discursos proteccionistas, xenófobos y de movilizaciones populares en aumento, ha añadido volatilidad a las decisiones empresariales. México, altamente dependiente del comercio con su vecino del norte, enfrenta un riesgo estructural que cuestiona su modelo exportador. Para millones de familias trabajadoras, el aumento sostenido de precios en alimentos, servicios y transporte ha significado un retroceso en su nivel de vida, en un entorno donde los ingresos reales no crecen al mismo ritmo. La tensión social y económica podría intensificarse si esta tendencia persiste en los próximos meses.

El segundo semestre del año será clave para determinar si México sostiene su recuperación o si, cae en una fase de estancamiento pronunciado. La respuesta no dependerá únicamente de las condiciones internacionales, sino también de las decisiones que tomen el gobierno, las empresas y trabajadores ante un panorama incierto. Si bien aún es temprano para hablar de crisis, la falta de respuestas oportunas y estratégicas podría llevar a un deterioro más profundo. Las señales están ahí, ignorarlas sería un error costoso.

A continuación, el boletín completo para su lectura, consulta y descarga:

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